Ciudadela Vauban de Villefranche-de-Conflent y Fuerte Liberia

La ciudad fortificada y sus murallas

(Acceso a 10 minutos a pie desde la estación)

Se puede acceder alfuerte Liberia por un sendero desde la estación del Tren Amarillo (unos 30 a 40 minutos a pie) y puede visitarse durante todo el año.

La ciudadela de Villefranche-de-Conflent

A principios del siglo XI, Guillermo Ramón, entonces conde de Cerdaña, fundó la ciudad de Villefranche-de-Conflent con el objetivo de convertirla en la nueva capital del territorio de Conflent y bloquear así el camino hacia las altas mesetas a los posibles invasores.

En 1654, la ciudad fue sitiada y tomada por los franceses. Parte de las fortificaciones se desmantelaron para que no pudieran ser utilizadas por los españoles. Hubo que esperar hasta 1669 para que el mariscal Vauban volviera a levantar y reforzar las murallas de la ciudad.

Aún hoy, esta antigua ciudad mercantil conserva bellas huellas de su historia y su condición de emplazamiento defensivo. Las fortificaciones de Villefranche-de-Conflent también forman parte desde 2008 del Patrimonio Mundial de la UNESCO.

Para comprender el sistema defensivo de la ciudad, pasee por las murallas y descubra el ingenioso trazado del paseo de ronda a través de una visita guiada catalogada como “Valor del Parque Natural Regional”. Vauban la cubrió con un techo para proteger a los defensores del fuego de mosquetes procedente de las montañas.

Los numerosos restaurantes y comercios de la ciudad le invitan a vivir un momento único, entre historia y modernidad.

Las murallas de Villefranche-de-Conflent

De origen medieval, las murallas de Villefranche-de-Conflent fueron rediseñadas por Vauban en 1669 para el rey Luis XIV.

Construidas a finales del siglo XI, cuando se fundó la ciudad, se añadieron torres entre los siglos XIV y XV. Vauban cubrió el nivel medieval con una bóveda y superpuso otro paseo de ronda cubierto por tijerales coronados con un tejado de pizarra. Este doble paseo de ronda superpuesto es único en la obra de Vauban. Además, añadió bastiones en las esquinas y uno en cada lado largo. Según algunos visitantes, las murallas se asemejan a un laberinto.

El acceso a las murallas se encuentra en el pueblo, junto a la Puerta de España, y están abiertas de febrero a diciembre. Los horarios varían según la temporada. La visita al interior de las murallas le permitirá caminar en altura dentro del espesor de las murallas que rodean la ciudad medieval.

En verano, los lunes y martes, se puede conocer este lugar en una visita a la luz de las antorchas que le sumergirá en un ambiente cálido y le invitará a viajar en el tiempo.

Fuerte de Liberia:

En el siglo XVII, la aparición de los cañones de pólvora planteó un problema crucial a la ciudad de Villefranche-de-Conflent. En efecto, la ciudad se encuentra en una posición muy encajonada: en un valle profundo y en la confluencia de dos ríos, el Têty el Cady. Por lo tanto, la reciente capital del Conflent se encuentra totalmente incapacitada para utilizar este nuevo medio de defensa.

El año 1679 marca el inicio de un proyecto de construcción de un fuerte, en una posición elevada sobre la ciudad, dirigido por Vauban. Así fue que en 1681 comenzó la construcción del Fuerte Libéria en un espolón rocoso de la ladera de la montaña, a 180 metros sobre el nivel del Têt. En tiempos de paz, este excepcional edificio militar podía albergar una guarnición de hasta 100 soldados.

Descubrir y visitar el Fuerte le hará viajar en el tiempo hasta la época remota de las últimas monarquías y los primeros imperios de Francia. Las reconstrucciones históricas (siglo XVII) instaladas en las 10 salas restauradas dan vida al lugar.

Se recomienda recorrer el acceso histórico al Fuerte por un sendero (a la derecha del camino subterráneo) en lugar del camino subterráneo conocido como elde los 1000 escalones que en realidad tiene 734. Con sus 180 metros de desnivel positivo para llegar al Fuerte, la subida requiere de una buena condición física, pero la vista del pueblo en la cima la convierte en una visita obligada. También se puede subir en vehículo desde el CaféLe Canigou dentro de la ciudad fortificada.

Independientemente del camino que elija para subir, una vez que llegue a la cima, tómese su tiempo para disfrutar de la excepcional vista de los valles del Têt, del Cady y del Rotja y del macizo del Canigó.