Encuentro con Laurent Lenfant, Director del Establecimiento Tren Amarillo, en la estación de Villefranche-de-Conflent/Vernet-les-bains..
La Revisión General (RG) abarca el material rodante de la flota histórica y está programada para un periodo de 3 años. Las revisiones generales anteriores se llevaron a cabo en los años 60 y 80. En principio, debería haberse realizado antes, pero las incertidumbres sobre el futuro de la línea la han pospuesto. Las operaciones de mantenimiento específicas han garantizado que el material rodante siga funcionando en estos últimos años.
Esta revisión general, financiada íntegramente por la Región por un importe de 20 millones de euros, permitirá que el Tren Amarillo siga circulando con mejores condiciones de seguridad y comodidad, alargando así su vida útil.
Un nuevo taller para la revisión general
Se han invertido 12 meses de trabajo en la construcción del nuevo taller de 480 m², construido para la ocasión en las instalaciones de Villefranche. Además de la actual revisión general, se seguirá utilizando para los trabajos de mantenimiento en el futuro. El edificio histórico de Villefranche no era totalmente adecuado para operaciones de esta envergadura… No obstante, se seguirán revisando/fabricando algunas piezas en otras instalaciones, como los motores de tracción enviados para su revisión al centro técnico industrial de Lyon.
Hombres y un tren, un equipo reforzado
El equipo de mantenimiento estaba formado por 10 personas antes de 2017 y ahora ha aumentado a 20. El periodo de revisión general que se avecina ha permitido la contratación de 12 personas por un periodo de 3 años. Estos empleos forman parte del proyecto y, por lo tanto, también son financiados por la Región. El Establecimiento Tren Amarillo ha contratado a 7 personas a través de una empresa especializada, que son formadas y supervisadas por los electricistas permanentes que conocen a fondo el Tren Amarillo.
En 1 coche motor hay 3500 m de cables eléctricos, para alimentar todos los equipos de baja y alta tensión, como los motores, la calefacción, la iluminación, etc., que pasan por debajo el piso del vehículo.
La Revisión General en detalle:
- Reparación de los compresores.
- Reemplazo de los ejes de los vehículos motores por ejes nuevos.
- En el nuevo edificio: desguace de vehículos/Limpieza/Pintura y laminado.
- En la parte histórica: pintura de determinadas piezas y reensamblaje de piezas.
Una cadena de montaje abarca ambos edificios (histórico y nuevo), lo que permite a Villefranche llevar a cabo este “retoque profundo”.
Una modernización que conserva el espíritu del Tren Amarillo
La Revisión General incluye trabajos de seguridad y modernización, con la conversión a LED de la iluminación de neón del interior de los compartimentos de pasajeros y los fanales (luces de señalización en los extremos del vehículo), el agregado de tomas USB y un sistema de información para los pasajeros. También hay piezas que actualmente no sabemos fabricar. Se trata de adaptarse para poder sustituirlas en el tiempo, pero sin desnaturalizar el Tren Amarillo y sus especificidades, para compensar la obsolescencia de las piezas.
Circulación/Seguridad de la línea
Actualmente, el Tren Amarillo circula entre 6 y 8 veces al día en invierno, dependiendo del día y los periodos de vacaciones escolares. En verano, 10 veces por día. Uno de los objetivos es duplicar esta cantidad. La seguridad depende de las personas, sobre todo del jefe de línea y los conductores. En la línea del Tren Amarillo no hay sistema técnico de interfaz entre el hombre y la vía férrea para compensar los errores humanos. Limitar el número de trenes significa limitar los riesgos (que aumentan en los cruces). Actualmente, el tren circula con total seguridad gracias a operadores especialmente formados que aplican rigurosamente los procedimientos de seguridad.
La SNCF ha encargado a un proveedor de servicios externo un estudio para desarrollar un nuevo sistema de seguridad para el Tren Amarillo, con el objetivo de controlar los costes. Entonces sería necesario aumentar la flota de vehículos, con la construcción de nuevos trenes para garantizar dicho plan de transporte y ofrecer, a largo plazo, una capacidad de circulación mucho mayor. Actualmente se está elaborando un pliego de condiciones que incluye el futuro sistema de seguridad que se diseñará.
Mientras tanto, a partir de 2024, se pretende aumentar el número de trenes de verano de los 10 actuales a 12. En 2012, el organismo nacional (EPSF), que tiene autoridad sobre la seguridad ferroviaria, limitó la circulación a 10 trenes para garantizar el cumplimiento de las normas de seguridad, con el objetivo de reducir significativamente los riesgos potenciales que podrían dar lugar a incidentes. Este invierno, SNCF Réseau probará la geolocalización de los aparatos de radio. El objetivo es proporcionar al jefe de línea una herramienta adicional para aumentar el nivel de seguridad. El STRMTG (Servicio Técnico de Remontes Mecánicos y Transportes Guiados), la nueva autoridad de seguridad encargada de supervisar las actividades ferroviarias de los ferrocarriles secundarios como la línea del Tren Amarillo, tendrá que aprobar la propuesta de aumentar la circulación con este nuevo sistema.